Autor: David M. Darst. Director general del enorme banco Morgan Stanley, estratega jefe de inversiones de Global Wealth Management Investment.
The Little Book That Saves Your Assets consiste en que, cuando se trata de asignar los activos de inversión en diferentes estrategias, el autor nos da un «principio fundamental de la inversión»:
“No hay que poner todos los huevos financieros en una sola cesta”.
En su lugar, debes repartir tu riqueza entre varias inversiones diversificadas y «no correlacionadas», para poder aplicarlo nos da principios y consejos de cómo manejar nuestras inversiones.
Aunque su información sobre cómo reequilibrar tu cartera es general, su habilidad para desglosar los conceptos financieros en términos sencillos hace que sus ideas sean útiles y digeribles para los inversores no profesionales como nosotros, Dinero es Dinero te recomienda su lectura.
Puntos clave:
1. Obtener y mantener tu riqueza, depende de asignar inteligentemente los activos.
2. Invertir es una cuestión de sentido común.
3. Cuando colocas todos tus ahorros, la herencia de la tía y la mesada de tus hijos en sólo uno o dos tipos de inversiones, activos que podrían pertenecer a la misma clase, por ejemplo, meter todo en una o dos acciones, bonos, metales o criptomonedas, el riesgo de perderlo se multiplica si algo sale mal, no son raras las historias de personas que metieron todo a una sola gran apuesta (YOLO) y cuando la situación se deteriora, van para abajo.
4. La mejor manera de gestionar tu cartera de inversiones es, asignar nuestros activos de forma equilibrada. Lo anterior significa invertir en una combinación de activos financieros, que son: bonos, acciones, bienes inmuebles, efectivo, materias primas, oro, etc.
5. Para alcanzar sus objetivos de inversión considera que cada clase de activos responde de forma diferente a los cambios en la economía y los mercados financieros.
6. Por lo tanto, la diversificación de tus activos te permite minimizar el riesgo de pérdida y maximizar las ganancias potenciales.
Diversificarte
No asignar tu dinero entre varias inversiones, puede ser un error para cualquier inversor.
La asignación de activos en varios tipos de inversión es importante por tres razones principales:
1. Diversificación
Independientemente del entorno económico y financiero, algunos tipos de inversiones seguirán ganando. De este modo, se puede crear riqueza a lo largo del tiempo.
El libro invita a construir un portafolio de activos «no correlacionados», es decir, clases de activos que reaccionan de forma diferente a las fuerzas del mercado o a los cambios en la economía.
Por ejemplo, los bonos son una inversión más viable durante los períodos de deflación, los bienes inmuebles son preferibles cuando la inflación es alta, y la renta variable tiene un buen rendimiento durante los períodos de baja inflación y recuperación económica.
2. Protección
La asignación de activos reduce nuestra exposición al riesgo financiero y nos hace menos vulnerables a los cambios en la economía. Para reforzar tu cartera, reequilibra periódicamente la proporción de dinero invertida en cada activo.
Puedes basar esta decisión en el tiempo (reequilibrar cada tres meses o una vez al año, por ejemplo) o en el precio (reequilibrar cuando los precios de los activos comiencen a aumentar, por ejemplo, un 10% de lo invertido originalmente).
3. Comprobar si vas bien con tu inversión
La asignación de activos de forma inteligente requiere reequilibrar «a largo plazo» nuestras inversiones o activos financieros como se les dice de cariño en el libro.
Para hacerlo correctamente, debemos monitorear lo que ocurre en el mercado financiero.
- ¿Cómo se comportan nuestras inversiones durante las subidas y bajadas de la economía?
- ¿Cambiará el valor de una inversión?
- ¿Hasta qué punto son predecibles sus rendimientos?
Antes de iniciar de lleno un plan maestro inversión, debes tener algunas cosas claras:
En primer lugar, qué tipo de inversor eres. ¿Cuáles son tus puntos fuertes y débiles? ¿Cuál es tu «mentalidad y psicología» respecto al dinero? ¿Quieres ser un toro o un oso?
Evalúa tu capital. ¿Qué ingresos probables generarás a lo largo de tu vida? Esto te ayudará a calibrar el riesgo que debes asumir y los activos en los que debes centrarse en las distintas etapas de tu vida.
Es una gran idea este ejercicio, pensar cuánto podríamos ganar durante los siguientes años y no sólo planear nuestros gastos, también nuestra estrategia de inversión.
La «inversión de por vida» requiere hacer un buen uso de la «diversificación, el reequilibrio, la gestión del riesgo y la reinversión».
Tus objetivos y obligaciones fiscales 🙁 y tolerancia al riesgo cambiarán a medida que te vuelvas una pasita de cabello blanco, por lo que debes planificar y asignar tus activos en función del tamaño de la cartera, la necesidad de «control de pérdidas», las necesidades financieras inmediatas y las «obligaciones futuras, ingresos y gastos».
Construir un portafolio de inversiones se hace para construir riqueza, pero también protegerla y extenderla
Tu cartera de inversiones es como tu casa:
Según el autor, una casa es gran una analogía de una cartera de inversiones. Algunos activos deben ser «funcionales» (como aquel cuartito donde almacenamos cosas), y otros deben ser «relajantes» (dormitorios) o «agradables» (el baño donde lloramos a solas cada lunes por la mañana).
Las acciones representan esta última categoría. Se compran cuando los tiempos económicos son buenos. Los bonos y otras inversiones de renta fija son como los dormitorios, son el nidito en donde uno quiere sentirse protegido, seguro y rodeado de mascotas.
Algunas zonas de la casa se reservan para una persona concreta (como el techo donde vive triste y solitario el pobre milaneso). En la analogía, representan inversiones «alternativas«, como los metales preciosos o las criptomonedas para quién le pueda acomodar un poco de especulación.
Los espacios funcionales, como el cuarto de servicio con su calentador de agua y su cuadro eléctrico, equivalen a inversiones en efectivo o bienes raíces.
La forma de decorar tu casa depende de tu personalidad y tu psicología ¿Elegirás alfombras, parquét o piso de tierra? Las inversiones concretas que hagas serán igual de personales.
La pregunta importante del capitulo es: ¿Te sientes preparado para construir nuevos cuartos en la casa por ti mismo? ¿O prefieres contratar a un “maistro”?
Del mismo modo, ¿Te sientes competente para gestionar tu propio patrimonio? o ¿Ahora recuerdas la vez que quisiste colgar un cuadro en la pared y derribaste el muro y mejor prefieres contratar a un gestor experto? Si es así, elige de quién tomar consejos de inversión o un asesor profesional con el mayor cuidado.
"Demasiada gente comete el error de comprar inversiones sin tener en cuenta lo que quieren que la inversión haga por ellos (excepto ganar dinero en un sentido muy general)."
Asignación de activos basada en objetivos
Pon en claro tus objetivos financieros y averigua qué combinación de activos es óptima para alcanzarlos.
Por ejemplo, si quieres ahorrar para la educación universitaria de tu hijo dentro de 18 años, deberías elegir inversiones agresivas de alto rendimiento, un ejemplo son las acciones frente a los bonos de renta fija.
Las acciones pueden oscilar violentamente a corto plazo, caen con mucha más rapidez de lo que suben, pero suelen proporcionar los mayores rendimientos a lo largo del tiempo.
Saber qué quieres que hagan tus inversiones por ti, es la esencia de la asignación de activos basada en objetivos, es el faro que guía tus decisiones de inversión.
Generalmente, los inversores aspiran a lograr uno o más de los siguientes objetivos:
- Protegerse de la inflación: Las acciones pueden protegerte de niveles bajos y medios de inflación. Pero: durante los periodos de alta inflación, las empresas se esfuerzan por mantener los costes bajos y pedir menos préstamos, lo que les dificulta crecer más rápido que la inflación. ¿Alguien dijo 2022?
- Aprovechar el crecimiento: Las acciones internacionales pueden exponer tu cartera a economías de crecimiento más rápido. Las «clases de activos de renta variable» son una buena opción durante largos periodos de crecimiento.
- Proporcionar seguridad «de los malos tiempos»: Los activos de renta fija, como los bonos de alta calidad, las inversiones en efectivo y los valores indexados a la inflación, pueden proteger tus ahorros.
- Generar ingresos: El objetivo de una inversión es el dinero en efectivo que acabará proporcionando. Los mejores activos de «pago» son las acciones que pagan dividendos o los fondos de inversión inmobiliaria como las FIBRAS de las que podemos recibir ingresos pasivos mensualmente.
- Crear estabilidad: Dependiendo de su aversión al riesgo, su cartera necesitará cierta estabilidad para protegerse de los cambios bruscos del mercado. Los activos estables incluyen «cuentas en efectivo, metales preciosos y fondos de futuros gestionados profesionalmente». También puede considerar los fondos de cobertura con fines especiales y los fondos cotizados.
- Contrarrestar la depreciación de las divisas: Un buen método es denominar algunas inversiones en activos extranjeros, por ejemplo, acciones y bonos de mercados emergentes. Quienes invertimos en acciones o ETF de Estados Unidos y somos de otro país, estamos dolarizando nuestras inversiones.
- Llegar a los 70 años y volverse un Sugar Daddy o una Sugar Mommy: Bueno, ésta la agregué yo, no es del autor.
Un enfoque de asignación de activos basado en objetivos, te permite desarrollar una combinación de inversiones que se ajustan a tus metas.
Este enfoque reduce los costes, ya que se realizan menos compras y ventas. Nada peor que comprar y vender en base a calentura o FOMO y de paso perder nuestros rendimientos en comisiones e impuestos.
La «asignación estratégica de activos» consiste en establecer cómo vamos a dividir nuestro capital en porcentajes a largo plazo para los activos, y luego mantener estos porcentajes durante un período prolongado.
La «asignación táctica de activos» implica el ajuste rutinario tu cartera de inversiones para aprovechar las tendencias del mercado.
Piensa en la “asignación táctica de activos” como un mecanismo de respuesta a los cambios no sólo del mercado, a veces a algo le irá bien y otras veces mal, debes ser flexible, también tu vida va a cambiar, cuando tienes 20 años tu estrategia deberá ser totalmente a cuando estás cercano a los 60 años y debes proteger lo que has construido.
Si vigilas atentamente el rendimiento de su cartera, puedes vender los activos que han ido bien y que, por tanto, han crecido hasta representar un «porcentaje mayor que el objetivo» de su cartera.
Utiliza los ingresos para comprar activos que hayan perdido valor recientemente. Reequilibra tu cartera de acuerdo con la máxima clásica de la inversión: «Compra barato, vende caro».
Siete errores que debes cometer si quieres perder tu dinero invirtiendo.
Debes tomar buenas decisiones de asignación de activos. Una serie de malas decisiones podría llevarte a la ruina financiera, pero los inversores suelen cometer los mismos errores. Vamos a proteger tu dinero y no caigas en lo siguiente:
No debes ignorar los detalles Hay que combinar ambos métodos, lo que no es fácil. Significa que debe supervisar cuidadosamente los activos individuales sin dejar de centrarse en sus objetivos a largo plazo.
Por muy bien que planifiques y asignes tus inversiones, los resultados no siempre serán los esperados. Es muy importante saber por qué. ¿Has investigado bien? ¿Tus fuentes eran erróneas? ¿Tus suposiciones eran erróneas?
Los grandes inversores siempre aprenden de sus errores.
De hecho, «no es realmente un error si se aprende de él», así que asegúrate de evaluar cada paso que tomas como inversionista y seguir leyendo la información Dinero es Dinero.
