Cómo inversionista, ver noticias de forma regular no tiene mayores beneficios. La gran mayoría de las noticias tienen efectos de muy corto plazo, por ejemplo, los movimientos en los índices en una sola jornada o los resultados trimestrales de compañías rara vez afectan en un horizonte de largo plazo. Por lo que, dedicar tiempo a seguir noticias no agrega mayor valor más allá del entretenimiento financiero.
Son pocas las noticias que tienen un efecto mayor en tus inversiones. Sólo los traders podrían beneficiarse de seguir algunas noticias cómo los anuncios de la FED de los Estados Unidos u otros Bancos Centrales.
Incluso para un trader, seguir noticias de una compañía podría ser contraproducente, pues hacer un trade el día de publicación de resultados trimestrales, puede ser extremadamente volátil e impredecible.
Para planear una estrategia de trading, leer gráficos, patrones y volúmenes dará más valor que seguir una noticia. Claro que puede complementar la estrategia, pero es una pequeña herramienta solamente.
No te han faltado noticias bursátiles en los últimos años. Quizás antes las noticias financieras eran un segmento aburrido qué no entendíamos, cosa que cambió cuando comenzó a generarse mucho más contenido de finanzas personales, los primeros influencers financieros y sobre todo; la pandemia.
Gracias a la política monetaria expansiva y paquetes de estímulos en 2020, a ese vejete moribundo llamado “mercado accionario”, le inyectaron esteroides y adrenalina, se volvió una bestia tatuada que nos sedujo, nos trajo emociones, ambición y la idea de que podíamos volvernos ricos en días. Incluso nacieron nuevos temas calientes como criptomonedas y NFT’s.
Ahora los videos y noticias financieras pueden ser más sensacionalistas, más confusas, contradictorias y con este nuevo público, las finanzas han ganado más tiempo al aire en las noticias regulares, hasta el tema se volvió moderadamente interesante.
Desde el desplome de Facebook o ahora; META, hasta las inversiones en meme stocks cómo Gamestop, pasando por el colapso de la bolsa en 2022.
¿Tiempo bien invertido?
Puede resultar agotador observar el ciclo de noticias que rodea el comportamiento bursátil de una empresa y no se diga de un sector o una economía entera. Los analistas recomiendan pasar por alto el ruido a corto plazo para poder mantener la perspectiva a largo plazo dentro del plan de inversión, es decir; no dejes que las noticias influyan en tus decisiones de inversión.
En lugar de vender y recomprar inversiones con regularidad basado en que sale en las noticias, nuestro legendario tío; Warren Buffett sabes ya, que tiene la filosofía de adquirir y conservar acciones durante muchas décadas, como mínimo.
Tal y como él aconsejaría, una acción con potencial debería ser una que un inversor pudiese poseer durante al menos diez años, la noticia que salió hoy sobre la bolsa de valores, ¿Será recordada en diez o veinte años? Si la compañía que te interesa reportó un crecimiento trimestral del 1% o el 5%, ¿Importa en el largo plazo? Probablemente no.
Toda empresa opera en una economía y toda economía es cíclica, aunque no lo parecía hasta hace unos años, cuando nos acostumbramos a que las acciones “siempre suben”, situación que está cambiando, gracias la crisis bursátil del 2023 que nos recordó lo natural de los ciclos económicos.
Da igual si te enteras o no de las noticias, al final las cosas sucederán y no es posible controlarlas
Según la Oficina Nacional de Investigación Económica, la economía estadounidense ha sufrido una recesión cada 58 meses de media desde 1945. Por lo tanto, espera siempre una recesión a la vuelta de la esquina. No compres acciones sin antes darte una idea del valor intrínseco de la empresa y que ese valor tenga en cuenta el efecto de una recesión en los ingresos, los costes, los beneficios, la deuda y el flujo de efectivo o caja. Es decir, nuestro famoso margen de seguridad.
En una recesión, lo más importante que hay que saber es que los demás inversores suelen entrar en pánico. Su pánico les hace vender sus participaciones a precios baratos porque piensan que los problemas serán de largo plazo, creen que necesitarán el dinero o temen más caídas del precio de las acciones, pensando que pueden aprovechar mejores precios.
El efecto psicológico de miedo extremo es del mismo grado que la euforia que hace que la mayoría de los inversores sobrevaloren las acciones en una expansión económica cuando nadie espera una recesión.
Mejor que ver las noticias diarias o ver los insignificantes movimientos de las compañías en el día a día, conviene más invertir nuestro tiempo en analizar cómo les ha ido a empresas o sectores que nos interesan en las recesiones anteriores.
Es mejor poner atención en cómo se han comportado los márgenes e intentar calcular el impacto en la empresa. Si no hay probabilidades de que la empresa quiebre, tienes un margen de seguridad, puedes usar los indicadores que te propongo en los análisis de esta página para tener algo parecido a un valor intrínseco.
Como la recesión media suele durar sólo 11 meses, hay tiempo para analizar las acciones, pero tampoco hay que esperar demasiado, ya que el mercado bursátil suele anticipar una recuperación.
Cómo evitar las trampas de valor
Las acciones que tienen crecimiento son tentadoras, incluso las de compañías con buenos fundamentales financieros y que tienen buena opinión entre los comentaristas de noticias, a veces estamos ante lo conocido como “Value traps” o trampas de valor.
Todos estamos ante la probabilidad de caer en una trampa de valor gracias a las noticias positivas sobre cierta acción, incluso gracias a un análisis financiero superficial.
Cómo lo recitamos en publicación tras publicación, el Value Investing es una práctica que busca invertir en compañía que valen más de lo que se pueda pagar por ellas. Por lo que se consideran una ganga.
Esto puede deberse a una baja relación precio/valor, una baja relación precio/valor contable, un crecimiento no reconocido o una alta rentabilidad por dividendo.
Un Value Investor espera obtener beneficios cuando el mercado reconozca finalmente que existe una disparidad entre el precio de la acción y lo que ofrece, es decir su valor real.
Espera que el mismo mercado y los inversionistas corrijan esa incongruencia valorando la empresa de forma justa, es decir: comprando como locos. Hasta que la acción sube de precio e incluso se sobrevalora, momento en el que el Value Investor vende.
Sin embargo, comprar una acción sólo porque parece barata o ha bajado mucho es arriesgado, porque la mayoría de las veces, suele haber una buena razón por la que la acción es una ganga aparente. No es fácil buscar esa razón, es cómo buscar una fruta fresca en una caja de frutas aparentemente saludables, pero podridas en su centro.
Cuando hay razón fundamental de porque una acción estaría barata, puede que el precio de la acción nunca se recupere, Algunas ideas de porque algo podría estar barato es la intensificación de la competencia, la falta de crecimiento, problemas de gestión, debilidad y contracción del sector, un mal ciclo para la industria.
Cuando la acción no se recupera, se convierte en una trampa de valor. Eso no te lo dicen las noticias, simplemente un superficial “la compañía creció contra el mes pasado y es el futuro”.
Evitar una trampa de valor es más fácil de decir que de hacer. Poseer una trampa de valor puede bloquear tu capital durante largos periodos de tiempo y tener un enorme coste de oportunidad para tu cartera de inversiones, como tener tu alacena llena de basura inservible por años en lugar de despensa de alta calidad, seguir a la compañía del momento en las noticias nos puede llevar a invertir en trampas.
Las noticias y los videos buscan llamar la atención con lo que hoy esté caliente y de moda, pero mañana ya no lo estará. Hace unos meses NIO, Beyond Meat o Peloton eran los bebés favoritos de los influencers financieros ¿En qué momento ellos abandonaron a sus seguidores al dejar de promocionar esas compañías?
A los seres humanos nos encanta la estabilidad. Pero el entorno de la inversión es completamente diferente.
Es un mundo en el que hay que aceptar la volatilidad, y es aún mejor si puedes aprovecharte de ella, pero las noticias no son el lugar para tomar decisiones, si no la educación financiera, asesoría de profesionales, análisis y estudio profundo, no sólo de lo que consideras agregar a tu portafolio de inversión, también de tu estrategia de inversión.
