¿Cómo sé si perderé dinero invirtiendo?
La probabilidad de perder dinero al invertir depende del riesgo que asumas al elegir un instrumento de inversión, que podría ser de renta fija y por lo tanto de riesgo menor a moderado o si eliges renta variable, cuya tasa de retorno no está pactada cuando comienzas la inversión.
Si inviertes para perseguir una tasa de retorno conservadora, digamos la tasa libre de riesgo, que podría ser CETES o por otro lado, si prefieres algo agresivo y volátil, como acciones de crecimiento o Criptomonedas, debes de entender que tus retornos dependen de cuánto capital inviertes, por cuánto tiempo y en qué lo inviertes.
Una de esas tres variables debes considerar para saber si perderás dinero; el tiempo en qué esperas ganar un rendimiento sobre tu inversión. El tiempo determinará en qué instrumento confiarás ese capital; entre más rápido lo quieres, más riesgo deberás de tomar, quieres el doble de dinero en nueve años; ahí tienes CETES. Lo quieres en unos minutos, ¿Qué tal ir a un Casino? Uno tiene más riesgo que el otro.
Como inversionista debes pensar en algo que muchos dejan de lado: El riesgo. Todo lo relacionado al dinero tiene un riesgo, desde perder poder adquisitivo por una inflación acelerada que desconoces si se saldrá de control o que encarecerá tus créditos por el posible aumento de tasas que implicaría, o qué te roben tu efectivo, o que las acciones que compraste se derrumben y jamás vuelvan al precio al que las compraste, tu poder adquisitivo no está seguro en ningún lado y es tu responsabilidad elegir dónde puede estar más seguro y darte rendimientos.
Cuando tomes la decisión de invertir en renta fija, es decir que hay una tasa de rendimiento pactada cuando comienzas tu inversión, el riesgo dependerá de la fortaleza de con quién invertirás, por ejemplo, en CETES al ser el Gobierno quién respalda estos bonos, el riesgo es en teoría bajo, tienes una ganancia estable, pero no tendrás los rendimientos más altos que existen, retorno bajo = riesgo bajo.
Cuando tomas la decisión de ir por renta variable, donde no existe un rendimiento garantizado y pactado, si no que dependerá de múltiples variables, lo haces porque quieres ganarle a la renta fija y potencialmente quieres ganarles a los demás inversionistas para presumirles tu nuevo Porsche en su cara.
Podrías invertir en acciones de crecimiento de compañías que podrían ser volátiles y por eso prometen en un futuro darte mejores retornos o en una nueva criptomoneda que depende únicamente de su volumen para justificar su precio, nadie te garantiza lo que ganarás o que no perderás todo tu dinero, pero prometer estrellas no cuesta.
Alto retorno = Mayor riesgo.
¿Por qué existe el riesgo al invertir?
Porque nadie puede predecir el futuro y hasta los mejores inversionistas del mundo cometen errores donde todo puede malir sal. El riesgo simplemente es una expresión de la incertidumbre sobre el futuro, en las inversiones el riesgo más importante es que el dinero no sólo no produzca los retornos deseados, si no que presente pérdidas o minusvalías y en el peor de los casos, desaparezca del todo.
Los dos elementos principales a considerar en la teoría del riesgo es: primero la severidad de que “pase lo que tenga que pasar”, o sea qué tanto podríamos perder y dos; la probabilidad de que algo suceda que nos produzca perdidas.
Por ejemplo, la probabilidad de que nos defrauden, un terremoto suceda, nos accidentemos, a eso que podemos académicamente llamar “suerte de perro” se le llama riesgo puro, ya que no depende de nosotros, es una anormalidad en nuestra vida cotidiana.
Por ejemplo, las inundaciones a las que cada año se enfrentan los habitantes de la Ciudad de México, nadie sabe qué día pasará en que su tarde se volverá una pesadilla por las lluvias, pero cuando comienzan las lluvias, algunos comienzan a prepararse con paraguas o se encomiendan a Tláloc, esas medidas preventivas aplican a cualquier aspecto de nuestras vidas. Más vale prevenir que lamentar.
Pero regresando a las inversiones, existe otro tipo de riesgo que debes de identificar; el riesgo especulativo. Que es la expectativa de ganar o perder tras tomar la decisión de exponer nuestro dinero a algún instrumento que bien podría dejar ganancias atractivas o, podría hacernos perder mucho dinero.
Se diferencía del riesgo puro en que nosotros tomamos la decisión de meternos en algo esperando tener ganancias. Lo asume desde quién decide lanzar un nuevo producto en su negocio a quién compra acciones de Tesla.
Si has comenzado a invertir desde hace unos años, es poco probable que hayas considerado el factor “riesgo”, ya que pocos hablan de él, sobre todo cuando venimos de años de crecimiento inaudito y sostenido del precio de las acciones. De ahí que falsamente comenzamos a creer que las “acciones siempre suben”, pero no es el caso como lo vemos en el mercado actual.
El momento de invertir debes de:
1) Identificar los riesgos potenciales. Ejemplo: la acción es de una empresa muy endeudada.
2) Medir el riesgo. En el ejemplo anterior: Tener a la mano el cálculo de las razones de liquidez, endeudamiento, circulante, etc. Para ver que tan malo es el problema comparado contra compañías de la misma industria y contra datos históricos. Como lo que hacemos en el análisis de acciones de Dinero es Dinero.
3) Tratamiento e implementación de medidas: Diversificar la inversión o evitarla.
Todo aquel que te venda la idea de que sabe el futuro y puede predecir el precio de una acción es un charlatán que necesita desesperadamente likes o venderte algo. Nadie puede saber lo que pasará, lo mejor que podemos hacer son escenarios. Hacer premisas de lo que podría pasar si la variable x o y sucede y cuál podría ser la resultante.
A partir de ahí tomamos decisiones; ¿Tenemos la confianza de que el gobierno será estable, honrará sus deudas y seguirá pagando sus bonos en diez años? Si sí, podríamos ver los Bonos de largo plazo como una opción. ¿Analizamos muy, muy detenidamente a Amazon antes de comprar una acción y es una oportunidad única? Adelante con su compra.
Nadie sabe el futuro.
Existen firmas internacionales completas a las que se les paga por hacer predicciones, ahí tienes a los bancos de inversión o los administradores de fondos con genios trabajando, pero incluso a los mejores en este negocio deben de dejar un margen de error, es decir un colchón por si se les “chispotea”.
Si fueras cliente de un gestor de fondos o tienes un asesor financiero, no puedes dejar que haga lo que quiera con el dinero, debe de especificarte que riesgos tomará y que riesgos no tomará. Especificar qué porcentaje meterá en pequeñas compañías, en bonos, en mercados de crédito europeos, etc. Debería de descomponerte la lógica de lo que hará con tu dinero.
Pocos tienen una persona que los asesore al respecto, muchos ahora tomamos nuestras propias decisiones al considerar algún fondo que para la mayoría equivale a la compra de algún ETF que haga las veces de nuestro “Fondo de Inversión”, si la decisión es 100% nuestra, al menos debemos revisar los documentos denominados “Prospecto de Inversión” e investigar en qué se mete ese dinero y cuánto se nos cobrará por esa gestión y saber algo del sector en el que estamos entrando, sus ciclos, cómo se gana o pierde dinero ahí.
Cuando inviertes buscas un resultado, debes preguntarte, por ejemplo:
Si no puedo predecir el futuro ¿El resultado que busco es alcanzable? ¿Por qué razón si compro esta Criptomoneda o compro esta acción, creo que valdrá el doble en un año? ¿Sólo por qué sí?
¿Cuál es el peor escenario? ¿Qué tan probable es que suceda?
Con las preguntas anteriores atacamos dos factores esenciales del riesgo: Probabilidad y Severidad, es importante que estés informado sobre la decisión que tomarás, que tengas tu propio proceso e investigues.
Créeme que si te dan un consejo de dos minutos sobre lo maravillosa que es una compañía, no es ni de cerca una lección de inversión válida, de hecho, creo multiplica la probabilidad de que tomes un riesgo excesivo con tu dinero.
La mitigación del riesgo es un tema muy complejo que involucra teoría de probabilidad avanzada, pero sólo serviría hablar del teorema de Kolmogorov para impresionar a mi jefe, y me correría de su oficina a los dos minutos. Mejor, vamos a tratar de aterrizar algunas estrategias prácticas de cómo disminuir el riesgo al invertir en otra publicación.
